… en algunas noches de vida enmudecida, existe un rastro sin recoger de
todos esos secretos escondidos en silencios que me alejan y me llevan a ti…Yo
soñaba cada día poder alcanzar la playa…
Yo soñaba cada día poder alcanzar la playa. Y ahora está tan cerca, casi ya la
puedo oler. Y espero cada vez más próximo al final. Ya puedo sentir tierra seca
tras la arena mojada. Y no me da la gana de pensar que nada es para siempre. Si
esta canción se acaba que acabe el mundo para todos. Todos somos nada sin las
palabras dime qué nos queda. Y vuelven algunas rimas a mi mente cansada. Partes
de guiones que creía olvidadas. Melodías que una vez pensé que iba a perder. Se
tornan ahora bellas y valientes sinfonías. Y hace tiempo que yo ya me fui, yo
siempre me estoy yendo. Pero siempre estoy contigo, aunque a veces pienses que
no hay nada. Cuando me quedo mirando como si estuviera ausente. Es porque estoy
viajando, no pienses que voy a perderme…
Sí, ya sé que el mundo seguirá girando cuando ya no quede nada. Y nosotros
vaguemos por la historia como simples hombres solitarios. Reyes que perdieron todo,
todo lo que tanto amaban por quererlo demasiado. Y lo intento cada día ser todo
lo que había imaginado. Y me encuentro que la vida siempre tiene algo preparado
que supera cualquiera de mis fantasías. Nada comparado con lo que realmente
sucedía…
… en algunas noches de vida enmudecida existe un vacío tras de mí que grita vida con permiso a seguir, y se abre la herida, y la vida lanza una patada al aire, y el vacío es su sitio… y el vacío se ocupa de silencio…. y todo lo demás se lo lleva el más escondido cajón de los secretos… que las lluvias y los soles y las hojas en el suelo los encuentren…
Ella quiere salvar el planeta y
él quiere que el mundo se gobierne solo. Ella vuela en bicicleta y él
la llama desde un taxi. Ella vive en todo el mundo y él ve el mundo
por la tele. Ella es una diosa y él es un cometa. Ella duerme
por las noches y no recuerda lo que sueña. Él sueña con dormir cuando
ella duerme y sueña con soñar lo que ella sueña.
Ella es la esperanza de la humanidad y él escribe mientras ella duerme.
Él fuma y obedece y ella habla y resplandece. Ella canta desnuda una
canción y él la mira y se relame. Él se pierde entre su pelo y ella
se abraza fuerte y dice:
“Que las noches con sus lunas y las lunas con sus huesos nos secuestren a los
dos. Que las lluvias y los soles y las hojas en el suelo nos encuentren a
los dos. Que los años y el presente nos sorprendan a los dos……”
Ella siempre mira hacia delante, y él jamás mira hacia atrás. Ella
duerme y sueña aunque no se acuerde. Él escribe mientras ella duerme.
Ella es la esperanza de la humanidad y él escribe mientras ella duerme. Él
fuma y obedece, ella habla y resplandece. Ella sonríe y devora la vida, él
devora la vida y sonríe. Él sueña con dormir cuando ella duerme y
sueña con soñar lo que ella sueña……
Desnudando alma en esta estancia que no es mía ni es tuya, estremece
este sabor a vacío en fatal contra de mil ganas de contarte, la memoria no
recuerda nada esta noche donde volar… sobrecoge el aliento sonoro de la
ausencia de tus palabras, huir molesta al sueño, pasear enoja a los deseos… y
las melodías erizan la piel asustada de no desear… existe un vértigo
indescriptible que embriaga este hoy de absoluto…