He adivinado otoño en las hojas en julio, versos dormidos en las puntas
de las ramas de un libro añejo sin portada, he visto camuflado en la suave
lluvia una verdad ardiendo detrás de la piel…. y es esa misma lluvia la que
camufla sentir mojándolo todo de calma, esa misma lluvia la que salpica el
tatuado de la espalda, esa misma lluvia la que bailando lento y sin luz deja la
miel en los labios con tu aroma recordado…
… estas gotas de julio me devolvieron a tu vida mojada, a ese
torrencial de besos y caricias… a esa violencia en forma de amor y urgencia….
gotas de agua cayendo que apenas dejan huella por el calor….
…y me estallaron los sentidos… y todos los aparentes decentes… este aroma débil a tierra mojada empapo el indefinible y convirtió el instante en tormenta arrastrando maletas y sentir entre pliegues… sed y albedrio emprendido al devocionario de todos los sentidos a ti…
… y te vi venir como quien piensa que nadie le ve… y solo pensaba en el
braille sobre tu ombligo, en la barra libre para todos los sentidos, en el
cobijo de tu pecho, en la ruina de mis deseos… en el tanto llenas entre mis
manos como entre mi alma… en me haces sentir y chica… que guapa andas….
… y sonreíste como quien no lleva armadura ni ropa interior… y se empañaron mis parpados al imaginar un beso sobre tu espalda… y se encendió la ternura… y salpico la cordura aunque no hubiera dudado…
… algunas veces el romántico en la sien se convierte en piel a pleno
grito, en perdida de equilibrio y otros hubiera de pecho encendido…
… algunas veces la lluvia avisan y otras veces los aviones no… y te
dejas perdido delante de la lluvia, ausente en un aeropuerto de sin sentidos con un adiós de miel en los labios…
… algunas veces el desnudo te deja sin aliento y te conviertes en un
eterno hormigueo, en un baile de infinitos donde colgar todos los destrozos…
… apareciste descalza y desnuda de mirada, apareciste magia de mi
propio pestañeo, apareciste para que tartamudearan mis caricias y bailara en
sueños de insomnio sin despertar….
… apareciste cataratas de deseo, un big bang dentro del pecho
para una noche débil de ron…