Sucepideces.al borde del sucericidio.



Sucede que a veces mi mente escupe el fin del mundo en un sinfín nudo de ideas,
directrices sobre mareas que nadan en desatados felices… y llueve poco y hay luna llena, y me atrevo a mirar al cielo en un susurro sin rima que ablanda venas…

Sucede a veces que me tropiezo en buen equilibrio, caminando sin aceras,
dibujando azules insaciables entre matices de pensar a alma llena…. sucede que a veces me pierdo en las grietas de la corteza, esa corteza fuerte que en un abrazo siempre desprende lo seco del ayer y te brinda su fortaleza…

Sucede que a veces se hace cómplice la inspiración a lo prohibido y la mente camina sobre un esbozo perentorio de una verdad desdeñada…y en un sucedido de estos comprendí que los azules y el amor no están en un ajeno, son y están en el yo… y sucedió que se volvieron eternos… mucho más y mejor…

 Sucede que aprendí a temblar no sólo ante unos ojos, también en el escorzo de un abrazo roto… y me salva… y aprendí a desdolerme… y sal y luna para todos los motivos a dos y no…

Sucede que a veces no puedo borrarme de las manos el azul… la sombra de tus caderas es etérea sobre la pared… y tu aroma sólo está dentro, como si esto fuera poco o nada y acaso todo y más…

Sucede que a veces la vida me regala donde encajar el envés de un abrazo que encontré en la vida misma, el nudo y la idea, el sueño y su sonrisa… sucede a veces, veces que van y vienen como agua a las rocas, como fuga de ansiedad contra una realidad que detiene…. y sobre ese espejismo de a veces se desboca la cegada razón que no se atiene… y el tiempo de nada sirve, no detiene, sentir tiene un empeñado con los recibos atrasados que, sin dar desvelo, ni herida, son eterno a compañía…

Sucede que a veces se acumula el verso de un beso y el verbo del escrito se vuelve sediento burdel a ideas y vagabundos…

… y esbozo un escorzo sin decir palabra, sonriendo en una mirada perdida, y la noche es cruel que extradita al sol…y este es cobarde y se esconde…. y huye la vida haciendo amor con la luna…

… y los puntos suspensivos se convierten en el tobogán del equilibrio emocional, en la montaña rusa de un amar con locura y equilibrio a susurro carne viva y mas…

… y el silencio y el secreto, se arriesgan a lo prohibido,… y como no está permitido, nunca nadie lo ha sabido… porque así lo he decidido…


…a manos frías, a mala ortografía, a defectos y manías, te amaré como te amo en cada sucericidio…


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Lamontagneazul

Las palabras son pentimentos que callan su significado clandestino, ocultan como testigo silencioso; deseo, pasión y hastió. Habitan en un espacio libertad donde divagan y se mezclan con una pizca de cordura, y con la locura que destilan todos esos pensamientos inoportunos del espejo de una noche y su montaña azul.
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Andrés Suárez - De ida (2002)

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