Besos ilegales.


Ella me llamo hace poco, encontró en un libro una dedicatoria en un margen de tiempos rotos: 

Llevo los bolsillos llenos de reales.
El sabor de tus besos ilegales.


Me llamo hace poco e intento quedar con al aquel muchacho, pero la nostalgia también es precisa y no lleva carmín los días de fiesta, ni huele a fruta fresca, es naftalina húmeda que desfigura huella….aquel muchacho ya no existe, ni la joven dueña del libro…

Fue en el meridiano de los ochenta, ella capitaneaba mi mirada y cada espacio en blanco eran palabras y dibujos a su espalda…

Ella era mi ausencia de las clases, el banco alquilado del parque, las carreras para no llegar tarde... y todas las seis de la tarde sentada en mis rodillas su lunar se acercaban a mis labios robándole amor al tiempo...

… y nos batíamos sin duelo, y se repitan las escenas sin rutina ni desdén, matábamos despedidas en portales, aprovechábamos cualquier roto de cualquier calle para meterle mano a nuestra edad quinceañera….cualquier excusa, cualquier concierto…

Han pasado treinta años y pregunto por aquel que ya no estaba….y no podía estar…. y tuve que callarme lo que no le pude contar:

…que aún recuerdo el día que nos dimos permiso para todos nuestros besos ilegales… licencia para amar…

…que todas las velas me siguen oliendo al húmedo de la madera de aquella casa vieja de su abuela…

…que no he visto a nadie como ella caminando en danza libre y haciendo el amor a cada crujir del piso de madera…

…que no encontré nadie con aquella sonrisa que encendía cualquier apagón…

…que nadie me pidió jamás un abrazo como ella…. sin nada más y solo piel….

…que siempre ha seguido tan guapa como aquel 85...

… y que tengo que callarme lo que la vida de bonito nos regaló… que su cuerpo ya es de otro

… y que hay amores con los que vives abrazado a ella y amores con los que no vives, pero mueres abrazado a ella….
  

Releo, escucho y hago autopsia de las cenizas, tengo los pies mojados todavía, hace frio y la histeria caníbal a veces se apodera del silencio...

...y mientras tanto los caracoles son capaces de caminar por un cuchillo afilado con su casa a cuestas y no morir en el intento....

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Lamontagneazul

Las palabras son pentimentos que callan su significado clandestino, ocultan como testigo silencioso; deseo, pasión y hastió. Habitan en un espacio libertad donde divagan y se mezclan con una pizca de cordura, y con la locura que destilan todos esos pensamientos inoportunos del espejo de una noche y su montaña azul.
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Andrés Suárez - De ida (2002)

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